Hablar de Cristo a los jóvenes es un reto en cualquier época histórica. Y lo es especialmente en la nuestra, cuando los cambios generacionales parecen acelerarse de un modo imparable. Con todo, la fe nos dice ùy la experiencia lo confirmaù que Cristo es la respuesta a las inquietudes del corazón humano. También los jóvenes de hoy pueden decir, como san Agustín, que su propio corazón está inquieto, y también, como Él, pueden encontrar la paz en el único que puede darla. Evangelizar los deseos de los jóvenes. Hablar de Cristo y de la vida eterna reúne las conferencias del III Congreso Internacional de la Enseñanza de la Religión, organizado en 2024 por el Centro para la Enseñanza de la Religión Católica (CER) de la Universidad de los Andes (Chile). Las ponencias aquí publicadas abordan tres reflexiones relacionadas con la evangelización de los jóvenes. La primera intenta mostrar a Cristo como aquel que responde a los anhelos más profundos de la generación que llena hoy las aulas. La segunda recoge distintos modos de hacer presente a Jesucristo, su persona y su mensaje, en la clase de religión. La tercera está centrada en un tema a menudo poco tratado: la vida eterna y, en general, todo lo relativo a las verdades últimas, la Escatología.